domingo, 21 de agosto de 2011

Un “Indiano” de Tremañes.

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Por la izquierda: Jesús Víctor (primo) de los famosos Nicieza de la Calzada, en el centro Arturo (el indiano argentino) mi tío, y a la derecha Lola Guerra (mi madre)

Tenemos siempre la idea de que un indiano es alguien que viene cargado de dinero y con ostentaciones de lo que aquí y ahora llamaríamos nuevo rico, sin embargo quien nos ha llegado de la Argentina de la ciudad de Moreno, es Arturo García González, uno de los “moliñeros” de Tremañes.

Y ha venido a sus tierra natal, bueno a sus dos tierras natales,  a Tremañes y a la Calzada, cargado no con dinero  sino con una inestimable memoria cargada de recuerdos puntuales y exactos. Es lo que diríamos la memoria viva de la parroquia, pues sabe punto por punto donde estaba todo, quien era pariente de quien, quien vivía en este o en aquel sitio.

Asi una vez más nos recordó que nuestros parentesco con los de “Pedrón”, o sea los del Estanco de Tremañés, y antes propietarios de una tienda de ultramarinos, y donde hoy reside toda una urbanización moderna al pie del Feve, pues ese parentesco viene de la que siempre he considerado como  una antigua tía: Rosario Piñera Díaz

Por ejemplo la ubicación del molino que regentaba  mi familia paterna, y que llevaban varias tíos y tías, y que dió origen al alias familiar de los “Moliñeros”  estaba situado no en lo que hoy podemos considerar Tremañes, sino en el actual Natahoyo, ya que antiguamente la parroquia de Tremañes comprendía los territorios de Santa Olaya y la Calzada, que colindaban con las parroquias de Jove y San José. O sea que el famoso Molin de Tremañes, o uno de ellos, se hallaba en un ramal del Río Pilón, y dicha instalación de molienda se ubicaba en las inmediaciones de la Fabrica de Loza.

De esta manera desgranando recuerdos, pues nos enteramos de aquella costumbre de aligerar las cargas familiares, y por la cual la familia de Armida  González  Álvarez y Jesús García Díaz, traspasó la tutela de mi padre Jesús “El Chan”,  a Isidro el ferroviario  de Villadangos y su mujer Isabel, que luego se convertirían en mis padrinos de bautizo.

O de cómo  más de la mitad de mis tíos “Moliñeros”, emigrados a la Argentina, y fallecidos allá con mi abuelo , salvo tres de ellos que quedaron acá con la abuela: Armando, Balbina y mi padre (Chus el Chan) los cuales por esas informaciones nos enteramos que nacieron en las casas de la  caleyina de Conchina la del Nietu, y cuya pariente su  madre, Rosario la  del Nietu era la madrina de mi tío Arturo.

Lo que es la vuelta de la “memoria”.
Víctor Guerra (Chusi el fíu de Lola y el Chan)